7 de octubre, Memoria de San Marcos Papa y Confesor.- Este santo romano, sucedió a San Silvestre y ocupó la silla apostólica, durante ocho meses, hasta su muerte natural acaecida el año 336, después de un rudo trabajo que no conoció descanso. Se distinguió por su talento organizador puesto al servicio de la Santa Iglesia. Gracias a èl, la unificación de ella, en lo interno y en lo externo, fue una realidad hasta el último confín del imperio romano. Y nadie más que él, pese al corto lapso de su pontificado, aprovechó mejor la era de paz iniciada por Constantino El Grande.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario